No supe elevarme más, pero de aquella altura de igual forma lograba ver las heridas pulsantes, la agonía comprimida y el inseparable miedo a ser traicionado, no recordaba la forma de volver a estar donde pertenecía, no veía nada más que risas descontroladas y burlas distantes de las personas que menos imagine , ya lo sé ... la envidia es grande y mi corazón muy inocente y frágil para entender semejante maldad.
No pude ejercer más la respiración, el aire no fluía más allá de mis pulmones mi cuerpo se adormecía y mi vista se empezó a nublar, un cosquilleo muy molestosos inundo mi cabeza, me elevaba cada vez más, mi estomago se estremecía... me dolía ... si que dolía ... el dolor más grande que había sentido, tan dentro tan despreciable, muy ondo e incomprensible , deseaba que todo acabara deseaba que esa nublada visión desapareciera en oscuridad... y así fué ...
mas mi corazón es leal ,tan fiel que echo trizas siguió latiendo, condenándome a seguir soportandome , soportándolos, humillándome, obligándome a encontrar algún día , algo que me atará a este mundo más allá de mis mismos sueños.
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